Por: Didier Yesid Parra. 1101
Es ésta, una historia de admirar, fue hecha de forma tan detallada que nos da una concepción clara de cómo es el infierno en la perspectiva de Dante. Me sorprendió el hecho de que incluyera como musa de sus poemas y cantos a su amor de infancia Beatriz, quien desgraciadamente murió mucho tiempo antes que se creara la historia. Dante, la usa como una representación de Divinidad y pureza, como si ella misma fuera la encarnación de un ser perfecto. Representa a Virgilio, su inspiración y maestro para componer sus versos, en esta historia él es su guía a través del inframundo y el purgatorio, siendo un mandato divino el guiar a Dante hasta el paraíso.
Si analizamos detalladamente la historia, nos damos cuenta de varios aspectos que serían cuestionables en nuestra época actual, como el hecho de que una persona de buena moral, por el simple hecho de no ser bautizada se irá directamente al infierno, cosa que nos demuestra cómo en nuestra religión se tiene un pensamiento muy arraigado a la idea del bautizo, haciéndonos pensar que es a veces más importante el hecho de estarlo, que ser una buena persona.
Aunque no soy muy fanático de los textos escritos en cantos, este me pareció excelente. Nos da una imagen de cada escenario que nos puede poner los pelos de punta con tan solo imaginar estar allí. Considero que la implementación de personajes como Beatriz fue algo crucial en la historia, el demostrarnos que aún en otro plano existencial un ser nos puede proteger como hizo ella, al mandar a Virgilio a salvar a Dante, es una gran muestra de fe y esperanza.
Realmente hubo todo un universo literario y religioso para proponer acerca de esta lectura, el libro es una representación perfecta de los planos espirituales, no por nada el ingenioso autor tardó casi 15 años en crear esta historia